lunes, 15 de diciembre de 2008

Si no oigo a mi corazón

Pasa. No son palabras huecas, pasa.
Tarde o temprano dejamos fingir ser otro en el afán de agradar a los demás para que nos quieran. Tarde o temprano nos reconciliamos con el espejo, pasa... y cuando pasa y se experimenta no tiene precio. No se puede explicar.

Escuchen la canción y lean la letra.

Ah, cuanto tiempo perdido en pensar
que la vida se puede explicar
Con veneno intenté curación
¿por qué confié en mi razón?

Ya en un mar de palabras me ahogué
y fue en vano quererlas creer
Pero al fin el castillo cayó
y adentro solo estoy yo

Vos ya sabías que todo es parcial
que no hay mapa que enseñe a viajar
que es el alma quien debe cantar
Que solo un tonto se pone a correr
cuando la lluvia le besa los pies

Sirve el tiempo su mismo licor
que cada año acelera el temor
que en mi copa se amargue el sabor
si no oigo a mi corazón .

Pedro Aznar

4 comentarios:

el Tomi dijo...

Toc...toc...toc...bueeeenas...una preguntita....¿no volvió Maricel?

Anónimo dijo...

Amiga, hoy entro en tu blog y encuentro esta perlita. Sabés que la música es el idioma que mejor entiendo, asi que disfruto realmente de la selección que hacés...y también de los dibus, jajaja!!!!
Tus palabras del inicio me vienen como anillo al dedo, justo, justo, en el momento preciso...
Gracias por pensar y sentir y compartir tus emociones con los que te visitamos seguidito.

Marycel dijo...

Hola Tomi ! Acá toy otra vez, anduve de viaje por Buenos Aires. Maricel bien, no se fue a ninguna parte, sigue donde debe estar. Gracias por preguntar. je!

Marycel dijo...

Laura, me alegra saber que si la mariposa aletea genera cosas buenas por otros lugares. Besos, te quiero.